El objetivo de esta actividad es claro, el aprendizaje siempre debe llevarse a cabo por medio de juegos, transmitiendo al niño la importancia de la no violencia.

La defensa personal puede jugar un papel muy importante en el desarrollo del niño, ya que las clases pueden emplearse para enseñar a trabajar en grupo, relacionarse, fomentar valores como el respeto, la responsabilidad, la disciplina además de desarrollar la elasticidad y la psicomotricidad.

Los niños aprenderán a regir tanto su cuerpo como su mente, un protocolo de defensa de la integridad física, técnicas de relajación, autocontrol y los conceptos básicos para un correcto comportamiento en la calle.

En nuestro centro deportivo no sólo nos centramos en dar patadas, puñetazos y técnicas, intentamos estimular al niño para que se relacione con los compañeros, trabajen en equipo y muy importante inculcarle un valor olvidado: RESPETO.

Nuestra premisa es que el niño aprenda divirtiéndose y este motivado, elogiando su esfuerzo y sus logros mediante camisetas de colores que irán cambiando según su esfuerzo y entrega.